El corazón de Langedoc, en el sur de Francia, una bella región con ruinas romanas, impresionantes montañas y el sur vívido del mar Mediterráneo, es el escenario donde se llevan a cabo las obras maestras que son los vinos de Gérard Bertrand.
La vida en el viñedo comenzó a los diez años de edad para Gérard Bertrand. Viticultor y propietario de 15 fincas, ha pasado los últimos 30 años ayudando a convertir la región vinícola del Languedoc, lugar que lo vio nacer, en una de las mejores del mundo.
Gerard ha sabido aprovechar las cualidades de esta tierra milenaria para producir vinos que importa a más de 60 países, en los que son reconocidos por su insuperable cualidad. En sus15 Châteaux y fincas vinícolas, se respeta la tierra mediante procesos de viticultura biodinámica, creando una variedad de vinos fabulosos como el Château l'Hospitalet, elegido mejor vino del mundo en 2019.Uno de los que podemos probar en México es el Gérard Bertrand Corbières, una agradable sinfonía de las uvas Grenache, Syrah y Mourvedre.
Gérard Bertrand ha creado, en cada una de sus fincas, vinos excepcionales de parcelas únicas, elegidas entre los más bellos terruños del Languedoc. Estas parcelas, seleccionadas por su excepcional situación ampelográfica y climática, se posicionan como grandes crecimientos del sur de Francia, la quintaesencia del terruño del Languedoc.
Siempre innovador, Gérard se ha incursionado al mundo del enoturismo. Su bello hotel Château L’Hôspitalet se encuentra ente viñedos, invitándonos a formar parte del fascinante mundo de la vinicultura. Su restaurante, l’Art de Vivre, nos deleita con platillos exquisitos. La cocina del chef Laurent Chabert es elegante, orgánica y los productos locales lo inspiran a diario. Laurent Chabert es un amante de la cocina, los productos lo guían en sus creaciones, cultiva su propia huerta y las hierbas aromáticas que dan a su cocina acentos mediterráneos.
Descubrir la finca de l’Hospitalet y su viñedo cultivado con técnicas de biodinámica en un entorno lleno de paz y en perfecta armonía con la naturaleza – es inigualable. Enclavado entre las montañas francesas de La Clape y el mar Mediterráneo, el Château l’Hospitalet ofrece a los visitantes una experiencia de inmersión vinícola única.
Comments