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  • Alexis Beard

Descubriendo Bretaña (Parte 1)


Francia es, sin duda, uno de los países mas hermosos del mundo. Y cada región de esta bella nación es única y fascinante.

Limitada por el mar y definida por su carácter tradicional, Bretaña es una hermosa región en el noreste de Francia. Pintorescos pueblos de pescadores se encuentran en bahías a lo largo de la costa atlántica, mientras que el campo verde está salpicado de pintorescos pueblos medievales y castillos de cuento de hadas. El paisaje varía de páramos pacíficos y bosques prístinos a playas de arena aislada y dramático paisaje costero.

El viaje empieza en Paris, en la estación de trenes Montparnasse. Aquí, hacemos uso del increíble servicio de RailEurope.

Con RailEurope podemos viajar todo alrededor de Europa en lujo y comfort. Ademas, lo podemos hacer en alta velocidad. Los trenes de alta velocidad han revolucionado los viajes en Europa, haciendo las ciudades más accesibles y acercando a las personas.

En los trenes de RailEuropa gozamos de paisajes espectaculares, de tal manera que un viaje en tren puede ser un destino en sí mismo. Para los jóvenes, ademas de ser cómodo y eficiente, resulta una opción a muy buen precio, ya que RailEurope ofrece un descuento del 50% a viajeros de entre 18 y 25 años de edad.

Nuestro viaje en Bretaña comenzó en el comfort de un tren de alta velocidad en el trayecto Paris - Rennes.

Rennes es la capital de Bretaña. Esta vibrante ciudad es el destino ideal para una escapada romántica o una aventura cultural. Descubrir las riquezas de Rennes, entre ellas sus casas de entramado de madera, el Parlamento de Bretaña, la Ópera y el Parc du Thabor, es adentrarse en el pasado.

Rennes cuenta con noventa edificios, o partes de edificios, clasificados oficialmente como Monumentos Históricos, entre ellos su importante casco viejo, en el que se puede contemplar callejuelas enteras flanqueadas de casas del siglo XVI, con fachadas de entramado de madera.

En el corazón de Rennes se encuentra un hermoso hotel boutique; Hotel Nemours. Una encantadora combinación de confort y elegancia, este es el perfecto portal para descubrir la hermosa ciudad de Rennes. Es un hotel excelente para los viajeros jóvenes que buscan estar cerca del divertido centro histórico de Rennes, repleto de bares, restaurantes y vida nocturna.

Nemours es un hotel adaptado a Rennes. Vibrante y joven, tiene una vivacidad increíble. Cuentan con un servicio online de recomendaciones: que hacer, que ver, donde comer y como disfrutar al máximo la ciudad de Rennes.

Rennes también es una ciudad gastronómica. Disfrutamos de una deliciosa cena en Les Pêcheurs (los pescadores), restaurante por excelencia para los amantes de los mariscos. Los mariscos, de hecho, son una de las especialidades de la región, cuya proximidad con el mar Atlantico significa amplia pesca.

En Les Pêcheurs podemos disfrutar de mariscos frescos preparados con ese savoire-faire de los chefs franceses. Desde un exquisito bacalao con salsa bretona hasta ostiones en su concha, la calidad es clave.

Otra especialidad de la región son las galettes. En La Saint-Georges, ubicada en el corazón histórico de Rennes, disfrutamos de un concepto nuevo e innovador: galettes cocina de autor.

La Saint-Georges está ubicada dentro de una antigua casa de madera que data a la época medieval. Por dentro, inesperadamente, la decoración es moderna y original. Las galettes son toda una experiencia, mi favorita fue la galette con foie gras, acompañada con un helado de vinagreta – un invento único e irrepetible.

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