Cuando hablamos de Inglaterra nos llegan dos muy diferentes imágenes a la mente: la de un importante país, histórico, sede a acontecimientos pasados de magnitud imposible de imaginar, y la de un país moderno, juvenil, hogar a buenísimos restaurantes y excelentes hoteles, amigable, abierto, fácil de explorar.
Londres es la combinación de esas dos imágenes, la combinación del pasado histórico de Inglaterra y un destino moderno, vibrante y divertido. Durante los recorridos en esta embriagante ciudad se descubre que hay muchos Londres dentro de ella, como una especie de constelaciones compartiendo el mismo espacio.
Una de estas brillantes estrellas es el May Fair Hotel, ubicado en el prestigioso barrio del mismo nombre, y en el que desde 1686 tenía lugar la Feria de Mayo o May Fair. El hotel se encuentra a poca distancia de la New Bond Street, famosa por sus tiendas de moda, así como del centro, al que se puede llegar caminando.
En una ciudad famosa por su niebla, el May Fair se vive como una primavera eterna, en la que las habitaciones amplias se inundan con luz, además de estar decorados con vivos colores en tonos verdes, cerezas o amarillos, como en The Amarillo Suite, que es un dechado de colores contrastantes y de diseño moderno, teniendo al color del sol como protagonista. Las habitaciones, una divertida mezcla de elegancia y de jovialidad, cuentan con enormes baños, almohadas de plumas y hermosos floreros.
Dentro del hotel hay un sinfín de placeres, incluyendo el cine privado más grande de la ciudad, compuesto con proyectores de alta definición, equipo de sonido de alta calidad y cómodas butacas. El May Fair Spa ha llevado los estándares de belleza y tratamientos a otro nivel, mediante su atención exquisita a cargo de expertos, así como de tratamientos pioneros. La exfoliación con sal marina y aceites consiente a la piel completa del cuerpo, dejándola suave; para nutrirla, la envoltura corporal sigue a la exfoliación, hidratando y nutriendo la piel.
La excelencia en la atención a los detalles hacen sentirnos a los huéspedes como verdaderos miembros de la realeza, pero fue gracias a su dedicación en la organización de bodas, fiestas y eventos especiales, que el hotel fue ganador del premio a la Excelencia 2017 por parte de Condé Nast Johansens.
El May Fair hotel es un ícono del diseño contemporáneo al mismo tiempo que del glamour del pasado, en el que la atención ultra personalizada es tan impactante como los amplios espacios de la magnifica propiedad.