El arte culinario italiano es versátil y acogedor. Su ingredientes frescos, técnicas tradicionales, flexibilidad y adaptabilidad a la innovación y a la creatividad hacen de esta exquisita cocina la favorita de muchos. A través del talento y la vibrante imaginación del chef Walter D’amico este arte culinario es elevado a su nivel más sofisticado y fascinante.
D'Amico no es solo el apellido de esta familia de amantes del arte culinario, sino que es también el nombre que decidieron darle a su restaurante hace ya más de doce años. Un paraíso para los que somos amantes de la comida italiana, D’Amico nos enamora a todos con sus magníficos platillos y estupendo horno para pizzas, donde se hacen maravillas:
Pizzas de cuatro quesos, de pesto y calabaza, de pera y gorgonzola, de salchichas italianas y hongos, de champiñón y alcachofa, entre muchas, y claro, la pizza especial de la casa que consta de mozzarella, salsa de pimiento rojo, calamares y camarones al ajillo, y la más reciente adición al menú: pizza con hongos de temporada y trufa – mi favorita.
Desde carpacho de salmón, atún marinado con limón y corazón de alcachofa hasta pasta linguine con salsa pomodoro y queso provolone, y risotto con camarones y azafrán, D’amico nos sumerge en lo más exquisito de la gastronomía italiana. Transcendiendo los años, los kilómetros y toda barrera, el arte culinario italiano nos trasporta a través de los sentidos.
Para la familia D’Amico crear un espacio, una comida y un ambiente especial es de las mejores cosas que existe en esta vida. Dar servicio, pero más que nada dar emoción y dar experiencias para ellos siempre ha sido lo primero y esto es palpable en cada momento que pasamos dentro de su bello restaurante. Ahora mas que nunca, este maravilloso toque humano nos enamora.
D'Amico se traduce del italiano a ‘de amigo’ y eso es justo lo que la familia intenta transmitir día a día en este magnifico restaurante, donde la pasión por la gastronomía y las ganas de siempre ofrecer lo mejor crean un ambiente de amistad y felicidad.
