Si pensamos en algo creado que sea representativo de la humanidad, democrático, que produce el mismo efecto en cualquier lugar, que no conoce fronteras y que habla el mismo lenguaje donde sea que esté, sin dudas, se trata del vino. El vino es internacional y se lleva bien con todo, puede elaborarse con uvas italianas siguiendo técnicas francesas en suelo americano, es el puente de unión entre culturas, es un amigo al que se invita a compartir nuestra mesa durante cualquier tipo de comida, a las cenas más elegantes, a las reuniones más divertidas, a los picnics al aire libre y hasta a los momentos de soledad.
Los vinos españoles más prestigiosos en todo el mundo son los de la D.O.Ca Rioja, que está entre las mayores denominaciones de origen históricas europeas. Beberlos es probar la historia, saborear una tierra rica en tradiciones y viajar a sus bellos paisajes, son vinos que siempre dejan un buen sabor de boca.
Sus vinos incluyen también vinos mezclados, vinos en los que se cambia el énfasis del sabor de la barrica al de la fruta, vinos ecológicos, Reservas y Gran Reservas, y hasta ecológicos,cada uno con una personalidad única, coquetos para los sentidos y completos para los amantes de las cosas bonitas de la vida.
Los riojanos nos reafirman que no hay mejor estimulante del apetito y del buen humor que una copa de buen vino, y qué mejor si está bien maridada. Se suele pensar en el maridaje como algo que sólo los expertos entienden, pero en realidad se trata de que encontremos el punto perfecto en que el comer y el beber nos resulte agradable y hasta sorprendente.
Los platillos preparados con carne de res y vegetales, como el mole de olla, se marida con Izadi Selección, elaborado con uvas Tempranillo y Graciano. La carne suave y jugosa se integra con este tinto de complejos aromas de frutos, de maderas finas y ahumados, en tanto que la textura del bocado se siente agradable junto con la sensación aterciopelada y de final largo del vino.
El bacalao preparado con papas y chile ancho, se integra con Oinoz crianza de Carlos Moro. Su atractivo color cardenal oscuro con notables tonos violáceos, danza con los colores del bacalao, mientras que sus aromas frutales y florales entre notas especiadas, contrastan con la fiesta de sabores del bacalao. Después de dejar el plato vacío, el vino nos deja una boca amplia, elegante y suave, con una agradable y larga sensación final.
CVNE Reserva es excelente para maridar con carnes rojas especiadas, guisos y cocidos, y hasta con barbacoa, mixiotes y los ricos chiles en nogada, ideal para disfrutar de un fin de semana relajado. CVNE resalta su añejamiento prolongado en barrica. En copa, la lágrima de este vino de intenso color deja una agradable sensación en boca, con notas de frutos maduros y final de persistencia media.
Para maridar chilaquiles al horno, son ideales los vinos elaborados con tempranillo, y para pozole, enfrijoladas, quesadillas y hasta tamales, los vinos rosados y espumosos son excelentes. El secreto de un buen maridaje está en arriesgarse, en asociar nuestros gustos con las diferentes personalidades de las uvas y del platillo, por eso, el maridaje de vinos riojanos con comida mexicana es todo un éxito.
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